martes, 19 de mayo de 2009

EL CREDO DEL EMPRENDEDOR


No escojo ser un hombre común, quiero trascender.

Es mi derecho ser distinto – porque puedo serlo.

Busco oportunidades – no seguridad ni oportunismo.

Quiero tomar riesgos calculados;

Soñar y construir,

Equivocarme y fallar para alcanzar el éxito.

Me niego a cambiar incentivos por favores;

Prefiero los desafíos de la vida

a la existencia garantizada y estable.

No cambiaré libertad por beneficencia,

ni mi dignidad por migajas.

Nunca me acobardaré ante algún ser,

ni me doblegaré ante cualquier amenaza.

Es mi herencia permanecer recto, tranquilo,

orgulloso y sin miedo;

pensar y actuar por mí mismo,

disfrutar del beneficio de mis creaciones,

encarar valerosamente el abrupto mundo

y poder decir:

¡¡¡Esto, con la ayuda de Dios, lo hice!!!